WordPress es una maravilla, pero todos sabemos que de vez en cuando tiene errores y algunos problemas que nos vuelven locos durante horas. La mayoría de ocasiones estos errores se solucionan de forma mucho más simple de lo que parece, pero necesitas haber caído en ellos en una ocasión anterior para saber realmente por dónde atacar el problema.
Uno de los errores en los que ya hemos caído varias veces y que es recurrente es el 403 Forbidden You don’t have permission to access.
La solución puede ser muy simple o muy compleja (como todo en la vida), empezamos por la más simple:
WP-Login
Este archivo base de WordPress suele fallar y dar este error. La mayoría de problemas de WordPress se solucionan subiendo una copia limpia del propio WordPress, así que puede ser la primera cosa que hagas.
Un truco también es mirar la fecha de modificación de los archivos, y de esta forma ver dónde puede estar el fallo. Por supuesto es recomendable hacerlo antes de subir la copia limpia de WordPress.
Si como es posible, esto no funciona lo siguiente es también típico, pero no por ello menos efecto:
Htacces
Este intrépido archivito regula muchas cosas, de él ya hemos hablado alguna vez, en una entrada sobre redirecciones que no estaba nada mal, pero para este caso, básicamente hay que mirar, primer su fecha de modificación, si coincide con el fallo de la web ya lo tienes, lo segundo es si por alguna cosa está impidiendo el acceso normal al archivo wp-login:
En este ejemplo se ve claramente que un plugin está gestionando, por cuestiones de seguridad, la entrada o no al wp-login y por tanto aquí puedes tener el error.
Una buena recomendación es que después de hacer una copia de respaldo del archivo, subas uno nuevo, forzando a que estos permisos desaparezcan. Si ya puedes hacer login y ha desaparecido el problema, pues corre a volver a activar los permalinks, porque al cambiar el archivo lo habrás perdido.
Si compruebas que todo sigue igual de mal y sin funcionar, pero que encima todos los permalinks de tu web han dejado de funcionar, no te alteres, sube tu copia de respaldo y seguimos:
Desactivar plugins
El siguiente paso es el que todos temíamos en un inicio, pero que se acaba convirtiendo en la forma de ver si es algún plugin puñetero que no te deja vivir tranquilo. En este sentido, la mayoría de manuales te dirán que «¡¡¡desactive todos sus plugins!!!» cosa que siempre me ha parecido una barbaridad, porque altera el normal funcionamiento de la web, y luego puede traer problemas.
Yo prefiero analizar un poco la situación, y si en el mismo archivo htacces ya había mencionado un plugin, pues empiezo solo por ese. Si se trata de un tema de accesos y usuarios, lo más habitual es que sea algún firewall, y en el caso que tuvimos esta semana era justamente eso.
Así que al desactivar el plugin todo volvió a la normalidad. Luego activamos modificando opciones y todo parece que funciona correcto.
Nada de esto funciona
En ese caso hay un truco sencillo, debes tirarte al suelo en posición fetal, gritar muy fuerte y llorar desconsoladamente. Ahora en serio, si no es nada de lo anterior debes hacer lo que acabamos haciendo todos aquellos que no somos genios en la programación: un ticket en el servicio técnico de tu hosting.
Conclusión
Los fallos de WordPress son habituales, muchas veces son pequeñas tonterías que se solucionan rápido, otras no, pero gracias a los millones de usuarios de WordPress por todo el mundo, siempre podemos encontrar a alguien que le ha pasado, y lo ha podido solucionar. Como en esta ocasión.
Así que no sufras ni te alteres al ver que la página no funciona, sin grandes conocimientos de programación vas a poder salir del apuro.
¡Espero que nos veamos en la próxima entrada!